El jueves hemos vuelto todos a casa un pelin manchados de color blanco, y eso ha sido porque hemos estado jugando con bandejas de harina. Primero nos hemos encontrado con la bandeja de harina, nos hemos sentado y hemos hablado de que no se puede comer o que no debemos tirarla al suelo. Cuando ya estábamos listos hemos empezado a meter las manos en harina y nuestros dedos y manitas se quedaban blancos como los del lobo del cuento de los 7 cabritillos que tanto nos gusta.
Tras estar experimentando y tocando la harina un rato, hemos introducido otro elemento al juego: cucharas, vasos... y ahí han empezado los trasvases, el lleno y vacío, los dibujos con el contorno de los vasos y muchas cosas más. Nos lo hemos pasado tan bien y estábamos tan concentrados, que casi ni se nos oía.
Y aquí unas fotos y unos vídeos de la experiencia que hemos hecho en dos grupos, y que seguro que repetiremos tras ver unos resultados tan estupendos.
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